lunes, 2 de diciembre de 2013

La evaluación

Durante las últimas 2 semanas, en la asignatura de Bases Didácticas hemos estado trabajando la evaluación. Cuando empezamos con esta asignatura hemos ido viendo diferentes puntos sobre la educación como cuáles deben ser las finalidades de la escuela, el modelo hacia el que debe dirigirse la nueva educación, el papel del maestro, el tipo de aprendizaje que hay que transmitir, etc. Hemos llegado hasta este nuevo apartado, la evaluación, que se trata del punto crítico final en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Para las clases en las que tratábamos la evaluación, nos hemos apoyado en una serie de vídeos en la que profesionales de la materia nos daban sus ideas y propuestas en relación a este tema. Se tratan de Neus Sanmartí, José Luís Castillo i JordiAdell Segura. Además, y como siempre, apoyamos lo dado en clase con un nuevo capítulo del libro de Zabala 11 ideas clave. Cómo aprender y enseñar competencias

           Como hemos ido viendo a lo largo de nuestras entradas, el sistema educativo tiene que evolucionar y establecer un sistema que trabaje por competencias y que el aprendizaje sea significativo. No obstante, por mucho que cambiemos y mejoremos la metodología no servirá de nada si al final no cambiamos la evaluación. Esto nos lleva a contradicción, pues intentamos evolucionar a un sistema que desarrolle una serie de actitudes, habilidades,… y que el conocimiento que obtenga pueda utilizarlo en situaciones reales. Por ello, si al final del proceso hacemos un evaluación, que supone un examen, todo el proceso pasará a un escalón inferior ya que el objetivo final y más importante será superar ese examen.

           En relación a la evaluación, durante estos días hemos estado viendo los tipos que existen, que son los siguientes:

Artefacto propio

Para que la evaluación sea completa tiene que estar dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje de forma CONTINUA.

            Profesionales de la materia ya muestran la gran importancia que tiene la evaluación dentro de nuestro sistema. Por ejemplo encontramos como Neus Sanmartí, en la conferencia que dio en Ibiza, nos muestra la importancia de la evaluación dentro del aula. Para ella, evaluar es “un proceso que conlleva, por un lado, recoger información con instrumentos o no (ver las caras, pasar por las mesas,…), trabajar esta información y tomar decisiones según la información obtenida; y, por otro lado, ver cómo podemos cambiar esta evaluación”.

           Siguiendo con Neus Sanmartí, podemos observar la gran importancia que le da a la autoevaluación de los alumnos, puesto que nuestro objetivo es que éstos obtengan unas competencias. Pero hay que ser realista, esto solo se consigue con un trabajo constante a lo largo de los años y necesario de cooperación entre los maestros.

          Para finalizar con esta profesional, destacar las condiciones que nos muestra a la hora de proponer actividades a los alumnos:

1)      Tener claros los objetivos del aprendizaje.
2)      Planificar la actividad.
3)      Tener claro los criterios de evaluación.

Otro profesional que coincide con la importancia de la evaluación es José Luís Castillo, aunque éste es más práctico que teórico. Este profesor nos muestra los elementos que forman la evaluación que él defiende:

  • Autoevaluación: Evaluación diaria a través de formularios.
  • Evaluación individual: Prueba en que, mediante preguntas competenciales, se pretende conocer lo que realmente sabe el alumno y mostrarle cómo puede mejorar. 
  • Evaluación en conjunto: Formado a su vez por 2 grupos:
    o    Evaluación de un conjunto: Presentación de un trabajo que el resto del grupo evaluará.      
       
    o   Evaluación de un colectivo: Un grupo de alumnos observa como el resto hacen una evaluación individual para darles una nota y consejos tras haber observado como han trabajado y respondido.


Este autor defiende una renovación, actualización e innovación de la escuela y currículum que me parece muy interesante. Con su pregunta “¿Cómo será el ciclo del agua en el año 2030?” me hizo ver sus peticiones de manera clara: que los alumnos obtengan unos conocimientos que se relacionen con su futuro.

Otro profesional que trata el tema de la evaluación, desde las tecnologías, es Jordi Adell Segura. En la entrevista que vimos nos da la aplicación de las tecnologías y el uso del e-portafolio en relación con la evaluación. Esta herramienta puede tener muy buenos usos dentro de la educación, como herramienta para el aprendizaje (documentación diaria de los conocimientos), evaluar ese trabajo y para demostrar lo que ha creado. Una vez finalizado, se puede hacer una reflexión sobre todo lo trabajado, provocando aprendizaje. Además, es una herramienta que permite aprender los unos de los otros, incluso permite la colaboración de otras personas.

Este profesional nos da uno de los principales objetivos de los profesores respecto a la educación y las tecnologías: “hemos de enseñar a los alumnos a aprender con las herramientas tecnológicas”.



Por lo que respecta a mi experiencia, toda mi educación se ha basado en recibir unos conocimientos para al final afrontar numerosas pruebas o exámenes, los cuales determinaban, mediante una escala (del 0 al 10; donde el 10 era lo máximo, 0 lo mínimo y 5 lo justo), si estaba aprobado o no.

Artefacto propio
 
Hasta que tratamos este tema en clase mi idea era la general: hay que sacar buena nota y como mínimo un 5 para estar aprobado. Incluso lo primero que me venía por la cabeza al escuchar “evaluar” era un examen, texto a analizar, redacción, etc. que tendría una nota.

Gracias a las clases que hemos gastado viendo este tema he podido aprender más sobre este tema, he recordado algunos tipos de evaluación y he conocido otros que no, como por ejemplo el informe PIS (de carácter externo). Me ha parecido estupendo haber conocido las ideas y opiniones de 3 profesionales de la materia también. No obstante, ante un cambio tan profundo aún no me hago a la idea de cómo sería el sistema con este cambio la verdad. Tendré que buscar ejemplos prácticos que se hayan llevado a cabo para poder informarme y coger una idea más clara y práctica.

lunes, 18 de noviembre de 2013

Las competencias

Durante esta semana hemos estado trabajando el tema de las competencias a través de nuestro autor base Antoni Zabala, autor del libro 11 ideas clave. Cómo aprender y enseñar competencias. A través de su libro y un video de la conferencia que dio en Ibiza, hemos hablado de ello.

 Mapa Popple sobre Competencias
 Artefacto propio

Antiguamente, la educación estaba basada en un modelo que fomentaba la memorización sistemática de los conocimientos, con el objetivo único de superar los cursos académicos. No obstante, ahora surge un modelo basado en competencias.

El concepto de competencia surgió en el mundo laboral tras la observación de que aquellas personas que tenían las mayores calificaciones no sabían responder a los problemas que se les ofrecía. En el mundo laboral, competencia significa realizar una tarea con eficiencia.

Zabala cogió esta definición del mundo laboral para pasarla al mundo educativo, quedando la siguiente definición:

La competencia sirve para identificar aquello que dé respuesta a los problemas, por lo que es la intervención eficaz en los diferentes ámbitos de la vida mediante acciones en las que se movilizan, al mismo tiempo y de manera interrelacionada, componentes actitudinales, procedimentales y conceptuales”.

Para que las competencias sean eficaces se debe seguir unos pasos:
-  Análisis de la situación e identificar los problemas básicos.
-  Revisar nuestros esquemas de actuación y decidir los más adecuados.
-    Aplicar el esquema de actuación adaptándolo a la situación.
- Movilizar los componentes de la competencia (actitudes, procedimientos, hechos y conceptos) de manera interrelacionada.

A la hora de dar una clase y dar unos conceptos hay que tener muy en cuenta la teoría y la práctica. No todo ha de darse teóricamente (problema de la memorización sistemática y conocimiento no significativo) ni todo prácticamente (“hacer por hacer”). Las competencias nos ayudarán con este conflicto, ya que implica reflexionar para afrontar una situación real y compleja, apoyándose en lo teórico. Aquí me gustaría incluir uno de los ejemplos que nuestra profesora nos dio en clase para ver esto último: los niños cuando juegan a las cartas. Con algo tan básico y natural del entorno de los pequeños, éstos aprenden los conceptos de “sumar” y a “restar” a través del juego: si pierden restan y si ganan suman.

Jugar a las cartas o cromos: una manera sencilla de aprender a sumar y restar
Artefacto propio

Multitud de instituciones como UNICEF, UNESCO o la Constitución Española reclaman el pleno desarrollo del ser humano en todos los ámbitos de la vida, por lo que las competencias se desarrollan en diferentes ámbitos como son los sociales (relación con la sociedad), los interpersonales (relación con los demás), los personales (autonomía y libertad) y los profesionales (relación con el mundo laboral). El objetivo es orientar hacia las posibilidades máximas de cada persona. Pero… ¡ojo! Esta formación es un concepto utópico, porque como bien comenta Zabala en su conferencia “¿Dónde está ese límite de la enseñanza?”
 
Resumiendo estos ámbitos, podemos decir que se refiere a todo aquello que se da en la escuela infantil para que nos ayude a obtener las competencias básicas que se darán da en la escuela de primaria y secundaria (educación obligatoria), y que es aquello que se entiende como básico para la vida. Más adelante se convertirá en competencias específicas cuando lleguemos a los niveles de bachiller, FP y universidad.

Las competencias, a su vez, están formadas por una serie de componentes (conceptos, hechos y principios, procedimientos y actitudes) que son necesarios dominar, ejercer y conocer para ser capaces de actuar competentemente y nos permitirán determinar las competencias específicas. Un ejemplo muy claro que nos propuso Zabala fue el de hacer una tortilla. Para hacer una tortilla primero hay que tener un concepto de lo que es una tortilla y cuáles son sus ingredientes, para seguir unos pasos y tener una actitud favorable que nos lleve a elaborar una buena tortilla.

Podemos observar pues que el objetivo de las competencias es llevar a cabo una serie de acciones para afrontar unas situaciones reales, partiendo de una base teórica significativa. Para que estos conocimientos sean significativos y funcionales tienen que haber una serie de condiciones en el aprendizaje por competencias, como vimos en una de mis entradas anteriores; Los 10 principios psicopedagógicos del aprendizaje significativo.

Me gustaría comentar que, tras haber hecho un estudio más profundo sobre este sistema, creo que es un sistema complicado de llevar a la práctica. Es un sistema que choca con los esquemas tradicionales y básicos en los que se ha basado la educación de nuestro país durante las últimas décadas en los que había que memorizar los conceptos para poder “soltarlos” en las pruebas evaluables, hasta que este sistema fue puesto en evidencia gracias a uno de los mundos más relacionados con la educación: el laboral.

Creo a la vez que es un sistema súper necesario para nuestra sociedad actual y futura, porque de nada nos servirá tener a personas que tengan un papel que certifique unas cualificaciones si luego éstas han sido olvidadas y no son capaces de usarlas para enfrentarse a los problemas. Si dices ser bueno en algo, tienes que estar dispuesto a demostrarlo en cualquier momento.

Para concluir quisiera decir que la clave de todo creo que es que hay que tener actitud y muchas ganas para poder hacer que este sistema se lleve a cabo en todos los centros educativos. Es un sistema que da mucho trabajo, tanto individual como grupalmente, y hace que haya que la enseñanza y el aprendizaje tengan que ser reelaborados, pero creo que estos esfuerzos no tendrían ni punto de comparación con los resultados que recogeríamos nosotros y los futuros miembros de nuestra sociedad.

lunes, 11 de noviembre de 2013

El currículum escolar

Durante esta última semana en la asignatura de Bases Didácticas hemos tratado un tema muy importante en la educación escolar como es el currículum. A través de un mapa de conceptos, fuimos estudiando todas sus partes como son su concepto, sus características, sus fuentes, etc.

Artefacto propio

El término currículum surgió hace pocos años; sus orígenes se remontan al año 1973 con la redacción de las Primeras Orientaciones y Programas, pero no es hasta la reforma educativa de 1990 que no aparece de manera generalizada.

El currículum es, para muchos didactas, aquel conjunto de conocimientos que se deben enseñar en cada etapa, las finalidades de estos conocimientos y todo aquello que los alumnos aprenden en la escuela. De este último surge el concepto de currículum oculto, que son aquellos conocimientos que los alumnos adquieren sin la intención del profesor (normalmente suelen ser malos hábitos como, por ejemplo, decirle a los alumnos que no se muerdan las uñas y el profesor sí lo haga). Hay que ser muy cuidadoso con este tipo de conocimientos que de forma involuntaria podemos dar a los niños puesto que puede ser un mal hábito, pero que podría ser mucho más grave si fuera una ideología.

El currículum está formado por 4 fuentes, las cuales son:

- La sociológica, que se encarga de seleccionar los contenidos adecuados a la sociedad actual;
- La epistemológica, que se encarga de escoger lo importante de cada materia;
- La psicológica, que se centra en la manera de aprender;
- La pedagógica, centrada en la forma de enseñar.

El currículum tiene una serie de características, que son:

- Único: es único por etapa, con unas finalidades y objetivos comunes para todos.
- Abierto: contiene un mínimo que cada profesor adaptará a las necesidades de la clase. 
- Descentralizado: se forma por las aportaciones de cada nivel (Ministerio de Educación y Comunidades Autónomas, los centros educativos y las clases. 
- Flexible: ya que los profesores pueden hacer sus aportaciones.

Estas características se van a ver retocadas con la implantación de la nueva ley de educación LOMCE, que pretende hacer un currículum cerrado en los que los centros educativos y maestros no podrán intervenir.

Por lo que se refiere a las partes del currículum, hablamos de niveles de concreción, los cuales son 3, que vienen explicados en el siguiente mapa de conceptos:

Artefacto propio

Por lo que conviene a aquello que forma el currículum, la LOE (2006) establece que  el currículum está formado por “el conjunto de objetivos, competencias básicas, contenidos, métodos pedagógicos y criterios de evaluación de cada una de las enseñanzas que regula la ley”.

En relación a los contenidos, la LOGSE (1990) estableció 3 tipos: los actitudinales (actitud que muestra el niño hacia el aprendizaje); los procedimentales (lo que el alumno tiene que saber para adquirir unos conocimientos) ; y los conceptuales (lo que se debe saber después de haberlo trabajado).

Tras la LOGSE, llegó la LOE (2006) que le da importancia a las competencias básicas, cuyo objetivo es que estos conocimientos sean significativos y puedan ser utilizados en la vida real.

Como hemos visto, el currículum es algo muy complejo en el que actúan muchas partes para poder conseguir una guía de enseñanza para los alumnos. No obstante, este trabajo se ve afectado por las condiciones sociopolíticas de la actualidad. Uno de los problemas más graves de la actualidad del currículum es su gran contenido que hace muchas veces que los alumnos no puedan dar todo el temario propuesto para su año de estudio o, como solución desesperada, que tengan que verlos deprisa y corriendo sin poder comprenderlos y sólo memorizándolos. Esto se relaciona con una de mis entradas anteriores, en las que comentaba el tema del aprendizaje significativo (que los conocimientos nos sirvan para la vida real y no aprender por aprender y que ese conocimiento se pierda con el paso de unos días).

La solución podría ser rebajar el nivel de contenidos, pero nos vamos a encontrar con la opinión negativa de la Administración y las familias. Por lo que se refiere a la Administración es la influencia que en ella hace la política (poca estabilidad en la educación cuando se cambia de gobierno). Por lo que se refiere a las familias es el pensamiento de que los niños no saben nada debido a todos esos temas del libro que no se han dado.

En mi experiencia como estudiante, no ha habido año en que en unas cuantas asignaturas quedaran siempre temas pendientes. ¿Solución? A mirárselo cada uno en casa y a “empollarlo”. ¿Consecuencia? No me acuerdo de nada de aquellos temas, mientras que aquellos que si me fueron enseñados de forma significativa perduran.

Para concluir con este tema, creo que hasta que nuestros políticos no dejen de jugar a deshacer los cambios que hizo el anterior gobierno no iremos a ninguna parte y más en el tema de educación, pilar base de nuestra sociedad actual y futura. Necesitamos estabilidad y una mayor libertad en el trabajo de nuestros profesionales, que son los que entienden.



Artefacte propi

lunes, 4 de noviembre de 2013

Los Principios Psicopedagógicos del Aprendizaje Significativo

En estas semanas, en la asignatura de Bases Didácticas hemos hablado sobre el aprendizaje y como trabajar para que éste sea significativo.

A la hora de hablar de aprendizaje nos encontramos frente a 2 tipos:

- Aprendizaje mecánico: obtener unos conocimientos a base de memorizar y repetir continuamente.

- Aprendizaje significativo: obtener unos conocimientos que podemos reproducir pero que a la vez nos sirven para responder a problemas reales y a comprender lo que sucede.

En la actualidad el proceso de enseñanza debe basarse en el aprendizaje de competencias, que son aquellos conocimientos, habilidades, ideas y valores que permiten a las personas hacer frente a contextos y realidades distintas. Pero este aprendizaje tiene que ser lo más significativo y funcional posible, puesto que sino no es así no se podrá aplicar eficazmente.

El nivel de significado del aprendizaje viene marcado por unos factores o condiciones a los que llamamos Principios psicopedagógicos, que han sido desarrolladas por las teorías constructivistas y socioconstructivistas de diferentes investigadores a través de distintos modelos experimentales. Estos principios son los siguientes:

1.- Esquemas de conocimiento y conocimientos previos: Supone construir el nuevo aprendizaje a partir de los conocimientos que ya poseen los alumnos.

2.- Vinculación profunda entre los nuevos contenidos y los conocimientos previos: Supone hacer una relación significativa y adecuada entre aquello que se posee previamente y el punto al que se quiere llegar con el nuevo aprendizaje.

3.- Nivel de desarrollo: Adecuar el nuevo aprendizaje con la etapa de desarrollo en la que se encuentra el alumno mediante métodos correctos.

4.- Zona de desarrollo próximo (Vigotsky, 1979): Hacer un aprendizaje gradual hasta llegar al punto que deseamos.

5.- Disposición para el aprendizaje: Que las capacidades de equilibrio personal, de relación interprofesional y de inserción social de cada persona sean positivas ayudarán al aprendizaje.

6.- Significatividad y funcionalidad de los nuevos contenidos: Lo que aprendemos tiene que tener un sentido para nosotros.

7.- Actividad mental y conflicto cognitivo: El alumno debe ser activo y llevar a cabo una actividad mental para reelaborar sus conocimientos.

8.- Actitud favorable, sentido y motivación: Que el alumno haga el esfuerzo por aprender, que tenga interés por los nuevos contenidos y dirigir al alumno al saber por aprender y no para alcanzar una nota.

9.- Autoestima, autoconcepto y expectativas: La autoestima y el autoconcepto inciden en las capacidades de las personas, en sus competencias y en su bienestar. Las expectativas sobre uno mismo determinarán el desarrollo o no de una actitud favorable hacia el aprendizaje.

10.- Reflexión sobre el propio aprendizaje. Metacognición: Es el factor calve en el aprendizaje de competencias que supone planificar qué estrategias utilizar en cada situación, aplicarlas, controlar el proceso, evaluarlo para detectar posibles fallos y ser capaz de aplicarlo a una nueva actuación.

Estos principios son las condiciones que deben existir en el aprendizaje de competencias, pero existen los componentes de las propias competencias:

- El aprendizaje de los hechos: son contenidos de aprendizaje singular, de carácter descriptivo y concreto que son necesarios para comprender la mayoría de informaciones y problemas.

- El aprendizaje de los conceptos: son contenidos de aprendizaje de carácter abstracto que exigen la comprensión.

- El aprendizaje de los procedimientos: son acciones ordenadas para conseguir un objetivo, con ayuda externa.

- El aprendizaje de las actitudes: engloba los valores, actitudes y normas. Las actitudes se aprenden mediante heteronomía moral (querer ser o vivir como otros)  y autonomía moral (actuar por propio convencimiento).

Esto que hemos estudiado me ha hecho pensar en mis años en el colegio como estudiante a la vez que en un futuro como maestro. En el colegio yo no tuve una educación basada en el aprendizaje significativo, sino que mis profesores se basaban todas las clases en los libros de texto, de los cuales leíamos y subrayábamos (pobre del que se olvidaba el libro en casa). Muchas definiciones, fórmulas, ideas,… fueron aprendidas de memoria y con el tiempo fueron olvidándose. Cuando pasé al instituto, esto se notó en algunas asignaturas. Incluso en la universidad he llegado a encontrarme (pero un caso muy aislado) con conocimientos que me daban de forma mecánica, sin que nos llegaran a explicar que función tenían y que nos hacían pensar “¿para qué me sirve esto?”.

Es cierto que llevar a cabo un aprendizaje significativo es una tarea dificilísima, en la que ambas partes (profesor y alumno) han de dar lo mejor de ellos y esforzarse al máximo, pero una vez que esto pasa, ambos crecen como persona y obtienen un conocimiento que será más difícil de olvidar. Esto es lo que me ha pasado en mis últimos años de instituto y de carrera, donde me he encontrado con profesores competentes que, además de darnos un montón de teoría, luego se han esforzado por ayudarnos a comprender su función y a desarrollar los conocimientos en múltiples y diversas situaciones. Estudiando esto, ahora me doy cuenta de lo afortunado que he sido al tener profesores de este tipo.

(Foto: Eduardo, nuestro profesor de Geografía, História y Audiovisuales durante los 2 años de bachiller)
Autora: Bianca Sánchez Gutiérrez

Además de mi experiencia como estudiante, este tema me ha hecho pensar en mi papel como maestro, que será una tarea complicadísima pero que intentaré hacer lo posible para llevar a cabo una enseñanza significativa y funcional, adecuada a las necesidades reales y personales de mis alumnos y que con ella puedan resolver cualquier situación.


lunes, 21 de octubre de 2013

El papel del maestro


Seguimos avanzando en el mundo de la educación, esta vez hacia el papel del maestro

En la primeraentrada hablábamos sobre las finalidades de la educación y sobre como el sistema educativo ha ido evolucionando hacia el sistema por competencias, que pretende  transmitir unos conocimientos y a la vez educar unas actitudes y aptitudes en los alumnos.

En la segundaentrada estudiamos, a través de Tonucci, el tipo de escuela que pretende llevar a cabo este sistema. En él, el alumno cobra un papel protagonista en su preparación, donde el profesor es el motivador y orientador de los alumnos. En este sistema se lleva a cabo una evaluación más amplia que refleja también los valores personales como el comportamiento, la actitud, etc.

Para esta entrada nos apoyamos en el texto de Jaume Carbonell, en el cual a través de una pregunta (“¿Cómo es el profesorado?” ) podemos conocer las diferentes actitudes de los profesores del sistema tradicional y que atributos básicos, pero no únicos, deberían tener los buenos maestros.

Llegar a ser un buen maestro es una ardua tarea puesto que a la vez que se quiere instaurar un sistema educativo efectivo hay que luchar contra la imagen que tiene la sociedad de su trabajo, sus exigencias, la mentalidad y actitud de muchos profesores veteranos, la escasa preparación que reciben y la precariedad de las instalaciones. Sin embargo, somos nosotros (los futuros maestros) los que tenemos que luchar, innovar y trabajar para que el cambio se dé.

Carbonell comenta que la base de todo maestro es saber improvisar ante los imprevistos y tener una autoestima alta. Esto me ha llamado la atención puesto que me ha recordado mi actitud durante estos años que he estado entrenando a los jugadores. No siempre los entrenos eran igual ya bien fuera por la asistencia de jugadores, de sus características, etc. Esto siempre ha hecho que a la hora de preparar los entrenos tuviera que pensar en posibles cambios y ejercicios complementarios. Y por lo que respecta a la autoestima, siempre he intentado transmitir a los jugadores que tengan confianza en ellos mismos y mejorar día a día, recibiendo por su parte una colaboración y actitud realmente buenas.

Según comenta Carbonell, las dos actitudes más perjudiciales en el mundo de la educación son el individualismo y el corporativismo. En mi caso, siempre he buscado que cada jugador diera lo máximo de él y que todos en conjunto dieran lo mejor como grupo. En baloncesto existe el dicho “un solo jugador no gana el partido”.

Como bien comenta el autor, hay que “conocer al infante en el contexto escolar” . Nuestro objetivo es que nuestros alumnos obtengan unos conocimientos y educarles y para ello la comunicación, la observación, el contacto con la familia y una relación de confianza serán vitales.  

También me parece interesante la idea de ser un ejemplo a seguir para los niños. Si hacemos un buen trabajo podemos despertar el interés de los más pequeños, que nos preguntarán constantemente y así podremos guiarles aún mejor en su camino en la educación. En mi caso, siempre me encuentro con algún jugador/a que me dice “quiero jugar igual de bien que tú”, los cuales tienen un nivel de implicación aún mayor a la hora de aprender.


 Autor: Óscar Tijeras Moreno


En relación a este tema destacamos a Miguel Ángel Santos Guerra y su publicación en su blog, donde hace un homenaje al duro trabajo que están realizando los profesores, los cuales luchan día a día contra dificultades y complejidades varias.

Para finalizar, me gustaría comentar que me ha llamado la atención el modelo que integra las TIC en la formación, el llamado modelo TPACK. Formo parte de una generación de personas que hemos podido disfrutar de las ventajas de las tecnologías y en mi educación muchos profesores se han apoyado en ellas para poder transmitir los temas, ampliar conocimientos, mostrarnos contenidos multimedia, etc. Esto hizo que la enseñanza fuera más dinámica y llamativa. Con el estudio sobre este método me ha abierto los ojos y pensar en que todo ello me sirvió para algo, y veo que es necesario para los nuevos alumnos, puesto que también les podrá ayudar en su educación.

lunes, 14 de octubre de 2013

Hacia una escuela constructiva



En relación con la entrada anterior y tema dado en clase, esta semana hemos continuado estudiando y comparando los 2 tipos de escuela: aquella que instruye, la tradicional; y aquella que educa.
Estos 2 tipos de escuela, llamadas generalmente escuela transmisora y escuela constructiva, teniendo toda una serie de puntos en los que se basa su educación, los cuales son iguales para las dos, pero con formas y características totalmente distintas.

Tonucci, en su libro ¿Enseñar o aprender? La escuela comoinvestigación quince años después [1990],  nos argumenta a través de estos puntos cómo ha evolucionado la escuela transmisora para ir dejando paso a la escuela constructiva, sin obviar que aún falta mucho trabajo por realizar y que este último sistema se asiente.
El modelo al cual la escuela tiene que llegar a convertirse es la constructiva tiene una serie de razones, que son las siguientes:

-          Igualdad: los niños antes de llegar a la escuela han vivido 6 años de experiencias, cosa que hace que haya adquirido unos conocimientos. En contradicción de la escuela transmisora, que parte de que todos los niños son iguales, la constructiva quiere aprovecharse de estos conocimientos como base para llegar a un nivel superior de conocimientos. 

-          Apertura: la escuela constructiva es partidaria de dejar que los niños puedan dar a conocer sus experiencias, que como es obvio, son del exterior de la escuela. De esta manera, a través de sus intereses y experiencias, podemos ampliar conocimientos, así como conocer todo aquello que es cercano a la escuela.

-          Lo cercano a la escuela: cuando el niño nos muestra sus intereses y experiencias, las cuales pueden ayudarnos a poder estudiar las cosas cercanas, aquellas que están en el exterior de la escuela y que pueden ser físicas, de las cuales los niños podrán obtener un conocimiento real y directo. No hay que encerrarse en la clase y que el profesor de la lección del libro de texto a sus alumnos.

-          El grupo: en una sociedad cada vez más relacionada, es de vital necesidad educar a los niños en ambientes de trabajo de equipo. De esta manera se puede trabajar de manera más completa, puesto que los niños tendrán puntos de vista contrastados, lo que les llevara a crear ideas, comparaciones, buscar informaciones, buscar testimonios en los textos o pedir respuestas a los expertos.

-          El maestro: en el nuevo sistema constructivo el papel del maestro se ve alterado; el maestro pasa a ayudar a obtener los conocimientos a través de la explotación de los intereses y las motivaciones de los niños. Para ello ha de saber estimular y orientar para que el trabajo se desarrolle y que todos progresen.  De esta manera el niño pasa a tener un papel activo en su educación, a diferencia de la escuela tradicional en el cual era pasivo, pues recibía la lección del profesor  y no se cuestionaba su saber.

-          La evaluación: en el sistema constructivo se tienen en cuenta más cosas del niño a parte de las calificaciones obtenidas en las pruebas, como por ejemplo el comportamiento, la actitud, el progreso, etc. De esta manera, todos las partes que intervienen en la educación del niño (escuela y familia) saben si los objetivos se han cumplido o no.

-          El psicólogo: una de las características fundamentales de la escuela constructiva a la que queremos llegar es la diversidad. No obstante, la presencia de un psicólogo iba en contra de ello, ya que se encargaba de trabajar con aquellos niños con problemas para la educación. Ahora el psicólogo trabajará con el maestro, aconsejándole y apoyándole.

-          La búsqueda científica: el maestro es el encargado de promover que los niños hagan un uso correcto de las herramientas de búsqueda. Para ello, el mismo profesor habrá de tener un papel más activo; para transmitir a un niño una serie de actitudes y que realice una serie de trabajos, él deberá conocer estas actitudes y trabajos.

La humanidad y la sociedad han evolucionado con el paso de los años haciendo que los medios comunicativos, la política, la economía y un largo sin fin hayan evolucionado. Nuestro sistema de educación es una parte más de la base de nuestra civilización, y es por ello que también ha de evolucionar para que nuestras generaciones futuras se adapten y se eduquen para la sociedad que les espera. Hemos de pasar del sistema tradicional y estancado que han vivido durante su infancia nuestros padres, abuelos,…  a un sistema abierto que desarrolle todo el potencial de los niños y que los eduque con unos valores de cooperación, igualdad e integración.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Finalidades de la Educación


A la hora de hablar de educación, nos podemos encontrar con diversas finalidades como por ejemplo acoger, asesorar, aconsejar, guiar,… No obstante, encontramos dos finalidades fundamentales que han marcado la evolución de la educación; éstas son Enseñar y Educar. 

Antoni Zabala i Laia Arnau, autores del libro 11 ideas clave. Cómo aprender y enseñar competencias nos ayudan a aclarar su evolución y significado así como la importancia que tienen hoy en día en el sistema educativo.

A lo que se refiere a enseñar, desde la revolución burguesa el sistema educativo que se ha desarrollado solo tenía como objetivo formar una élite universitaria mediante un sistema con carácter propedéutico, basado en una selección de aquellos alumnos “preparados” que han superado las pruebas eliminatorias. ¿Cuáles han sido los fallos? No se ha dirigido a todos, solo a una minoría (aquella que tenía los recursos y los que superaban las pruebas); se ha basado en alcanzar unos conocimientos que solo iban a servir para pasar los cursos académicos; y se ha formado mediante un sistema basado en una memorización sistemática de los conceptos, sin ponerlos en práctica, lo que acarrea que no se puedan afrontar situaciones reales.

Todo ello ha contribuido a un cambio necesario en el sistema hacia uno que desarrolle a nivel académico así como las capacidades de la persona. Este sistema es el sistema por competencias (“aquello que caracteriza a una persona capaz de realizar una tarea concreta de forma eficiente”) . Tuvo su origen en el siglo XX y con la globalización económica, cuando comienza a haber una necesidad de tener una población preparada, tanto profesional como socialmente (con criterios y valores).  Aquí entra en juego la finalidad “educar”, muy importante para poder formar a aquellos que compondrán la futura sociedad, con unas actitudes y aptitudes que les ayude a desarrollarse en el ámbito privado como en el profesional , así como desarrollar unos valores éticos que ayuden a todos a convivir en armonía y libertad.

Pero este cambio no solo ha sido y ha de ser en la escuela, sino que también incluye a la familia, ya que la escuela no puede abarcar ni cargar con todas las responsabilidades, por lo que su trabajo ha de ser conjunto con el objetivo final de educar a los alumnos/as, transmitirles unos conocimientos formales, no formales e informarles, y conseguir un desarrollo integral de sus capacidades.

Otro autor que tiene relación con este tema expuesto es Delors, que en su libro titulado La educación encierra un tesoro nos muestra cuáles son los pilares básicos de la educación. Éstos son: aprender a conocer una cultura general amplia; aprender a hacer para hacer frente a las distintas situaciones; aprender a vivir y comprender a los demás; y aprender a ser autónomo, con juicio y responsabilidad.

Con estos pilares vemos que este autor, al igual que Zabala y Arnau, defiende que la educación no solo enseña unos conocimientos, sino que también forma a la persona unos valores éticos, morales y sociales.

Este sistema por competencias es el más completo que existe y que es de debido uso, con el objetivo de formar a unas personas que sabrán utilizar los conocimientos, además del uso de la razón, adquiridos para poder afrontar las situaciones que se irán encontrando a lo largo de sus vidas. También se tienen en cuenta los valores éticos y morales de igualdad, responsabilidad y comprensión de los demás para poder vivir en una sociedad cada vez más cambiante.